Si alabas, todo cambia.
Cuando alabas a DIOS, todo cambia. No hay nada que
pueda resistirse a una adoración en espíritu y verdad. Cuando ni siquiera
tienes el deceso de alabar y decides entrar en la adoración, hacer un
sacrificio de alabanza y es en ese momento que el yugo que te ata se pudre y
alcanzas libertad, todo cambia. Al entrar en esta adoración profunda tu espíritu
se encuentra con DIOS y deseas que ese momento nunca termine. Alaba y glorifica
a DIOS y veras SU gloria. JESUCRISTO dice en Juan 4:23 Mas la hora viene, y ahora es,
cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad;
porque también el Padre tales adoradores busca que le adoren.
4:24 Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que adoren.
4:24 Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que adoren.
Alábale. DIOS,
te amo.
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